Durante esta semana de mayo, las clases online de religión desde 5º de Primaria hasta 2º ESO se han basado en trabajar el lado positivo de las cosas que ocurren a lo largo de la vida. En este caso en concreto, en los efectos positivos del confinamiento.

Uno de los objetivos era, lógicamente, que los alumnos sepan descubrir y valorar que todo hecho en la vida puede verse como cara y como cruz. Además, de la importancia de poder encontrar razones para que las cosas sean cara o se vean como cara.

Los resultados no pudieron ser mejores: no solo más de 100 hojas de cuaderno con ideas, sino que la mayoría de los chicos han sabido valorar y descubrir que en este tiempo especial, encerrados en casa con sus padres y hermanos, han servido para estrechar lazos, realizar hobbies, aprender cosas nuevas, valorar lo que se tiene o adquirir una mayor empatía con los demás, entre otros.

Lanzamos una moneda al aire. Sale cara. ¡Qué bien! Podría haber salido cruz, pero es mejor que salga cara.