En 2020 los alumnos trabajarán por competencias, los profesores aplicarán el aprendizaje colaborativo en clase, las tabletas y los libros digitales estarán implantados en las aulas y más de un docente utilizará las impresoras 3D. Estas son algunas de las previsiones del estudio Perspectivas 2014: Tecnología y pedagogía en las aulas que, tras analizar las opiniones de pedagogos y tecnólogos, vislumbra cómo serán las aulas y las dinámicas educativas del Estado en un futuro próximo. El informe ha sido desarrollado por el Gabinete de Comunicación y Educación de la Universidad Autónoma de Barcelona y aulaPlaneta.

EL FUTURO DE LAS AULAS

¿Cómo serán las aulas en seis años? ¿Qué dispositivos estarán implantados en las escuelas? ¿Qué servicios y metodologías se utilizarán? El estudio Perspectivas 2014: Tecnología y pedagogía en las aulas trata de dar respuesta a estas cuestiones y ha puesto fecha a la integración de dispositivos digitales, servicios educativos y nuevas metodologías en las aulas.

Los expertos establecen tres etapas en este proceso de cambio:

• En dos años. Se prevé que buena parte de las aulas estén dotadas de wifi y proyector, lo que permitirá la utilización de contenidos y servicios como los libros digitales o los recursos educativos abiertos. En lo que respecta a las metodologías, se consolidará el trabajo por proyectos, que supondrá una suerte de avanzadilla a la introducción de nuevas prácticas en las aulas.

• En cuatro años. Los libros de texto tradicionales se verán superados por los libros digitales. Las aulas dispondrán de tabletas y pizarras electrónicas que facilitarán el uso de sistemas colaborativos, y modificarán procesos esenciales como la evaluación, el estudio y la relación entre tutores y familias. Alumnos y profesores se animarán a utilizar juegos educativos en Red y compartir opiniones, contenidos y proyectos en redes sociales educativas. En cuanto a las prácticas didácticas, metodologías como los aprendizajes por competencias, colaborativo, analítico, por exploración o enfocado a la resolución de problemas arraigarán en las aulas, proporcionando al alumno un mayor protagonismo. De este modo, la educación buscará potenciar las capacidades de los alumnos, y no solo sus conocimientos.

• En seis años. Servicios como los entornos digitales, la geolocalización o la realidad

aumentada permitirán que el aprendizaje traspase las barreras del aula. Gracias a ellos y a metodologías como la pedagogía inversa o flipped classroom, las aulas serán más abiertas y creativas. El aprendizaje de los alumnos será más práctico, y en función de cómo evolucionen los precios, podrían empezar a verse en las aulas dispositivos como las impresoras 3D o los robots educativos.

CONCLUSIONES DEL ESTUDIO

Las conclusiones del estudio apuntan a un proceso de transformación radical de la educación: las aulas serán más abiertas, creativas y diversas, y el aprendizaje fomentará el desarrollo de las capacidades de los alumnos y será más práctico, lo que facilitará que los alumnos apliquen los contenidos al mundo real.

En las aulas se dibujarán tres escenarios esenciales:

• Exposición: incluirá la presentación, el debate, el diálogo y la interacción.

• Creación: abrirá un espacio al desarrollo, la invención, la exploración y el ensayo.

• Estudio y ejercitación: incluirá el espacio de investigación y estudio propiamente dicho.

Por otro lado, las políticas de digitalización de las aulas y el uso de servicios digitales actuarán como catalizadores de este cambio. Es decir, la utilización, por ejemplo, de libros de texto digitales favorecerá la transición hacia nuevos modelos pedagógicos.

Y la actitud y formación de los profesores será clave en el proceso de cambio. Cuanto más adecuada sea su competencia digital y su competencia mediática, más efectiva será su apropiación de los nuevos recursos tecnológicos.

Más información: http://www.aulaplaneta.com/descargas/aulaPlaneta_Perspectivas-2014.pdf